Una adicción diferente

La comida y nuestras emociones.

¿Comes sólo cuando tienes hambre o cuando te sientes estresado, enojado, triste, aburrido, etc.?

La mayor parte de la gente piensa, que hablar de adicciones es hablar de cigarro, drogas, alcohol, etc.
Sin embargo, no es así.

Existen dos tipos de adicciones:

1. Químicas: drogas, alcohol, cigarro, café, etc.,
2. No químicas: juego, compras, trabajo, sexo, deporte, comida, etc.

Casi cualquier conducta que produce placer y nos ayuda a evadir, física o mentalmente, situaciones molestas o dolorosas, puede convertirse en una adicción.

La línea que divide una conducta placentera, de una adicción, puede ser muy tenue y podemos cruzarla fácilmente, sin darnos cuenta.
Las principales características de una adicción son:

• Sentimos que no tenemos la fuerza de voluntad necesaria para poder controlarla o eliminarla.
• Es una parte importante en nuestra vida, a pesar de los problemas que nos puede causar.
• Dependemos de ella para sentirnos mejor.
• Ocupa una parte importante de nuestros pensamientos y/o de nuestro tiempo.
• Se dejan de hacer otras actividades, para planearla o para llevarla a cabo.
• Afecta nuestro cuerpo, nuestras relaciones, trabajo o forma de vida.
• Nos causa angustia cuando decidimos terminar con ella.
• Cuando no la controlamos, nos provoca culpa y daña nuestra autoestima.

Las 7 "C" del problema del alcohol.

Siento CULPA por mi modo de beber.
Recibo CRITICAS.
Trato de CAMBIAR de bebida.
Trato de CORTAR lo que tomo.
Busco CONSUELO.
Busco CALMARME.
Tomo una COPA matinal.
 Una persona es alcohólica cuando el alcohol interfiere en su vida. Por eso la sabiduría de la vida está en cambiar aquello que podemos.

La continuidad de la adicción.

Un adicto no se convierte en tal de la noche a la mañana. Existe una progresión en la que primero se realizan comportamientos y experiencias que posteriormente pueden convertirse en adicciones con el tiempo.

En la mayoría de las adicciones, el uso repetido crea una "tolerancia" por la cual se necesita más y más substancia o actividad para sentir la satisfacción que la adicción proporciona. Eventualmente, el adicto tiene que utilizar la cosa (o realizar la actividad) sólo para sentirse normal. Esto es lo que realmente significa "dependencia".

Por tanto existe una continuidad en la adicción que va desde la pre-adicción a las etapas avanzadas de dependencia. La progresión desde el uso a la adicción se puede medir de dos maneras:

1. El efecto que los comportamientos adictivos tienen sobre el efectivo y sano funcionamiento personal.

2. La intensidad de la ansiedad producida por la substancia, actividad, relación, etc.

Tomadas en conjunto, estas dos medidas pueden ayudar a las personas que realizan comportamientos adictivos a medir su progresión respecto a la adicción.

 Sabemos que son muchos los casos de adictos hoy en día por eso se crearon varios sistemas de recuperación Sea física o psicológica, sabemos que se puede vencer una adicción. Millones de personas han sido ayudadas en su recuperación, y muchos millones permanecen en recuperación toda su vida.

Adicción y tratamiento

La adicción es una enfermedad primaria, progresiva y mortal.

Primaria, ya que le puede suceder a cualquier persona, sin surgir como consecuencia de otro problema. Progresiva porque la enfermedad empeora cada vez más mientras que la persona no reciba tratamiento. Y mortal, ya que además del peligro de sobredosis, el consumo provoca un deterioro progresivo de las funciones vitales del organismo hasta que este deje de funcionar.

El uso indebido de sustancias, como fenómeno social es altamente preocupante. Durante los últimos dos decenios, países de todo el mundo han experimentado un alarmante aumento de la incidencia del uso indebido de sustancias entre los jóvenes adolescentes, y con el pasar de los años, la edad de consumo es cada vez menor, habiendo niños adictos de entre 10 y 12 años.
Estamos convencidas de que los jóvenes deben trabajar por su propia rehabilitación. Buscamos que sean los protagonistas de su historia, liberadas de sus dependencias, y abiertos al crecimiento. El programa está liderado por profesionales de la salud ayudados por operadores socio-terapéuticos: ex-adictos rehabilitados y capacitados que actúan de modelos a seguir. Su participación proporciona a los jóvenes un sentido de propósito y dirección, haciéndolos sentir más conectados a las actividades y la misión del programa.

CARTA DE UN JÓVEN ADICTO A SU PADRE.

Adiós querido papá.

Lo siento mucho pero creo que esta es la última vez que me podré dirigir a vos. En serio lo siento mucho.

Es tiempo que sepas la verdad, voy a ser breve y claro: la droga me mató Papá.

Conocí a mis asesinos a eso de los 15 o 16 años de edad. Es horrible, ¿No es cierto?

¡Sabes cómo fue! Un ciudadano elegantemente vestido, muy elegante realmente y que se expresaba muy bien, nos presentó a nuestro futuro asesino: LA DROGA.

Yo intenté rechazarla. De enserio yo intenté, pero este señor se metió en mi dignidad diciéndome que yo no era hombre.

No es necesario que diga más, ¿No es cierto?

Ingresé al mundo de las drogas. No hacía nada sin que las drogas estuvieran presentes, yo sentía que las demás personas y la droga, “mi amiga”, sonreía y sometía…

¿Sabes papá? Cuando uno comienza, encuentra todo ridículo y muy divertido incluso a Dios lo encontraba ridículo. Hoy en este hospital, reconozco que Dios es lo más importante en el mundo, sé que sin su ayuda no estaría escribiendo lo que escribo.

Papá, no vas a creerlo, la vida de un drogadicto es terrible. Uno se siente desgarrado por dentro. ES HORRIBLE Y TODOS LOS JÓVENES DEBEN SABERLO PARA NO ENTRAR EN ESO. Yo no puedo dar tres pasos sin cansarme. Los médicos dicen que me voy a curar pero cuando salen de mi habitación mueven la cabeza. Papá, solo tengo 19 años y no tengo chance de vivir. Es muy tarde para mí. Perdóname, perdóname por hacerte sufrir con mis locuras. Adiós, querido papá.

Adicciones durante el embarazo.

Antes que nada es importante advertir a los lectores sobre dos prejuicios igualmente perjudiciales, alentados por ciertas publicaciones poco serias que abordan, demasiado a la ligera, el tema de los medicamentos y adicciones en el embarazo. 

El primero de ellos es el que indica que todos los males que suelen padecer normalmente las embarazadas, desde los vómitos y náuseas hasta la ansiedad o las subidas de peso, pueden ser eliminados por medicamentos más o menos milagrosos, que son bien difundidos por esos mismos medios masivos, publicidad mediante.

Debemos aclarar que la mayoría de estos trastornos del embarazo son habituales y, en cualquier caso, no es conveniente suministrar ninguna de estas drogas sin consultar previamente a un especialista.

Como influyen en la salud del bebe las adicciones durante el embarazo

Pero es preciso también considerar el prejuicio inverso, por el cual algunas embarazadas, advertidas por ciertos anuncios tremendistas que también parten muchas veces de la radio, la TV o las revistas, no quieren tomar ningún medicamento, aún los específicamente recetados por su médico.

Esta última tampoco es una buena práctica y puede causar problemas serios. Por ejemplo, la fiebre causada por una angina, una cistitis o una bronquitis, puede, según la edad estacional en que ocurra, someter al embrión a temperaturas inadecuadas. Tenemos entonces que, si bien hay una gama de medicamentos que están contraindicados para las embarazadas (generalmente esta advertencia suele figurar, por una cuestión legal, en su prospecto) hay muchos otros que no ofrecen problemas. 

Por eso es necesario que en cada caso se consulte al obstetra, quien evaluará la relación perjuicio-beneficio que hay entre la toma del medicamento y el problema que supuestamente lo hace necesario.

¿Eres mujer y fumas?

El tabaco es una droga muy dañina y mortal, pero ¿Sabías que perjudica más a las mujeres que a los hombres? Entérate por qué esta adicción es tan peligrosa.

El tabaquismo mata más personas en el mundo que cualquier otra enfermedad y un supuesto símbolo de igualdad o emancipación ha conseguido aumentar entre sus numerosas víctimas a millones de mujeres en todo el mundo.

Y aunque los riesgos y daños son parecidos en ambos sexos, las condiciones sociales que rodean a las mujeres son diferentes, lo que las hace más vulnerables a ellos, además de exponerlas a mayores posibilidades e sufrir afecciones adicionales ligadas a diferencias hormonales y a la función reproductiva.

El consumo de tabaco en las mujeres aumenta en las ciudades, conforme es mayor el grado escolar y en los puestos laborales altos y si bien para las fumadoras el tabaco les ayuda a sobrellevar la carga de la vida cotidiana, al mismo tiempo están deteriorando a pasos agigantados su calidad de vida, la de su familia, al exponer constantemente a sus hijos al humo del tabaco y la de su entorno social.

Las ideas de igualdad de género, éxito social y delgadez, son unos de los factores de riesgo más grandes sobre todo en las adolescentes que a su vez están incursionando en nuevos terrenos y piensan que éste es uno de los que denotarán la aceptación social.

Los daños adicionales que el tabaco provoca en la mujer está relacionados con la reducción de la fertilidad y la fecundidad y los efectos antiestrogénicos.

Existen mayores riesgos de aborto, parto prematuro y embarazos ectópicos, además que aumentan considerablemente los trastornos de placenta previa, parto prematuro, malfomaciones congénitas, aumento de la mortalidad peri natal y afección del peso y talla del producto, quienes al nacer con bajo peso son más vulnerables a las enfermedades respiratorias, problemas de desarrollo integral riesgo de muerte, como lo demuestran los estudios realizados por la Dra. Guadalupe Ponciano, jefa de la Clínica contra el Tabaquismo de la UNAM.

Otros daños son de orden cardiovascular, gastrointestinal, de densidad ósea, caries, mal aliento y los de envejecimiento prematuro de la piel, así que si tú piensas que fumar es un placer, después de conocer esto, habría que pensarlo mejor, ¿No crees?.